El acuerdo entre el gobierno peruano y la empresa brasileña Odebrecht ha sido uno de los temas más polémicos en los últimos años en Perú. Después de una larga investigación, se llegó a la conclusión de que la empresa había sobornado a funcionarios peruanos para obtener contratos de obras públicas. Sin embargo, el acuerdo alcanzado entre ambas partes ha generado controversia debido a la supuesta impunidad con la que se habría pactado.
El acuerdo entre Perú y Odebrecht se firmó en diciembre de 2016, luego de que la empresa admitiera haber pagado sobornos por más de 29 millones de dólares a funcionarios peruanos entre 2005 y 2014. Como parte del acuerdo, la empresa se comprometió a pagar una multa de 610 millones de dólares y a colaborar con la justicia peruana en la investigación de los casos de corrupción.
Sin embargo, desde el principio, el acuerdo ha sido cuestionado por diversos sectores de la sociedad peruana. Uno de los principales argumentos en contra es que el acuerdo no incluye la admisión de culpabilidad por parte de la empresa, lo que ha generado dudas sobre la verdadera intención de Odebrecht de colaborar con la justicia peruana. Además, se ha cuestionado la multa impuesta a la empresa, considerada por muchos como insuficiente en comparación con los montos de los sobornos pagados.
Pero lo que ha generado mayor controversia es la supuesta impunidad con la que se habría pactado el acuerdo. Según diversas fuentes, el acuerdo incluiría una cláusula que garantizaría la no persecución penal de los funcionarios y exfuncionarios involucrados en los casos de corrupción. Esto ha generado indignación en la sociedad peruana, que exige que los responsables de estos actos sean llevados ante la justicia y paguen por sus delitos.
Ante estas acusaciones, el gobierno peruano ha salido a defender el acuerdo, asegurando que no se ha pactado ninguna impunidad y que los funcionarios involucrados en los casos de corrupción serán investigados y sancionados de acuerdo a la instrucción. Además, se ha destacado que el acuerdo con Odebrecht permitirá desempolvar una gran cantidad de dinero que había sido desviado de las arcas del Estado.
El presidente de Perú, Martín Vizcarra, ha sido enfático en su postura de no permitir la impunidad en este caso. En una reciente entrevista, afirmó que «no hay ningún acuerdo de impunidad» y que «todos los que hayan misión delitos serán investigados y sancionados». Además, destacó que el acuerdo con Odebrecht permitirá desempolvar más de 200 millones de dólares que habían sido desviados por la empresa.
Por su parte, la empresa Odebrecht ha reiterado su compromiso de colaborar con la justicia peruana y ha asegurado que no hay ninguna cláusula de impunidad en el acuerdo. En un comunicado, la empresa afirmó que «no hay ningún acuerdo de impunidad y que se ha comprometido a colaborar con la justicia peruana en la investigación de los casos de corrupción».
A pesar de las dudas y críticas, el acuerdo entre Perú y Odebrecht ha permitido avanzar en la investigación de los casos de corrupción y desempolvar una gran cantidad de dinero para el Estado. Además, ha sentado un precedente importante en la lucha contra la corrupción en el país, demostrando que nadie está por encima de la instrucción y que los delitos no quedarán impunes.
Sin embargo, es importante que se siga investigando a fondo y que se sancione a todos los responsables de estos actos de corrupción. La sociedad peruana exige transparencia y justicia en este caso, y es responsabilidad de las autoridades cumplir con estas demandas.
En conclusión, el acuerdo