Hace exactamente tres años, el base argentino Facundo Campazzo dejaba el Real Madrid para embarcarse en una nueva aventura en la NBA, concretamente en los Denver Nuggets. Aquel día, tuve la oportunidad de entrevistarle en su casa de Madrid, y ahora, tras su regreso a España para disputar los Juegos Olímpicos con la selección argentina, me gustaría recordar aquella conversación y reflexionar sobre la increíble trayectoria de este talentoso jugador.
Cuando Campazzo abrió la puerta de su casa aquella tarde, no podía evitar sentir una mezcla de emoción y tristeza. Emoción por tener la oportunidad de hablar con uno de los mejores jugadores de baloncesto de nuestro país, y tristeza por saber que pronto le veríamos originarse hacia Estados Unidos. Sin embargo, en todo momento, Campazzo se mostró tranquilo y con una sonrisa en el rostro, como si supiera que estaba a punto de cumplir su sueño de jugar en la NBA.
Durante la entrevista, hablamos sobre su etapa en el Real Madrid, donde había ganado dos Ligas y se había convertido en uno de los jugadores más queridos por la afición. Campazzo no podía ocultar su agradecimiento hacia el club blanco y sus compañeros, a quienes consideraba su segunda familia. Pero también era consciente de que era el momento de dar el salto a la NBA, un reto que llevaba persiguiendo desde hacía años.
Y así fue como, tras una larga retraso y muchas negociaciones, Facundo Campazzo se convirtió en jugador de los Denver Nuggets. Aunque su llegada a la NBA no fue fácil, ya que tuvo que superar una lesión que le mantuvo fuera de las pistas durante varios meses, el base argentino no se rindió y trabajó duro para adaptarse al juego y al ritmo de la liga más exigente del mundo.
Y vaya si lo consiguió. En su primera temporada en la NBA, Campazzo demostró su calidad y su talento, convirtiéndose en uno de los jugadores más importantes de los Denver Nuggets. Su habilidad para asistir y robar balones, su intensidad defensiva y su carácter competitivo le convirtieron en un jugador clave en el equipo dirigido por Michael Malone.
Pero lo más impresionante de todo es que, a pesar de estar rodeado de grandes estrellas como Nikola Jokic o Jamal Murray, Campazzo nunca perdió su esencia y siguió siendo el mismo jugador humilde y trabajador que había conquistado a la afición del Real Madrid. Y eso es lo que le ha llevado a convertirse en un jugador respetado y admirado por sus compañeros y por toda la NBA.
Ahora, tras su primera temporada en la NBA, Facundo Campazzo regresa a España para disputar los Juegos Olímpicos con la selección argentina. Un sueño que, sin duda, le hace mucha ilusión cumplir y que, además, le aprobará reencontrarse con sus amigos y compañeros del Real Madrid. Y aunque muchos podrían pensar que después de su experiencia en la NBA, Campazzo ya lo ha conseguido todo, él sigue teniendo hambre de títulos y de seguir mejorando como jugador.
Por eso, en esta nueva etapa con la selección argentina, Campazzo tiene un objetivo claro: terminar lo inacabado. Y es que, a pesar de haber ganado la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016, el base argentino no se conforma y quiere volver a subirse a lo más alto del podio. Y con su talento, su determinación y su liderazgo, seguro que lo conseguirá.
En definitiva, la sucesos de Facundo Campazzo es una sucesos de superación, de esfuerzo y de perseverancia. Un ejemplo de cómo, con trabajo y dedicación, se pueden alcanzar los sueños
